¿Te has preguntado alguna vez por qué actúas de esa manera?, ¿Por qué sientes lo que sientes, por qué piensas de esa forma, y cómo es que llegaste a los resultados que tienes ahora en tu vida?
En realidad, todo proviene de una secuencia lógica basada en Ciencia Psicánica.
¿Qué es Psicánica? Es una ciencia acerca del SER y de todo lo que pasa en la vida interna del ser humano: consciencia, voluntad, percepción, la mente, las emociones, las identidades y las relaciones humanas.
La ciencia Psicánica se basa en una secuencia lógica llamada Secuencia Causal. La vida consiste de 5 áreas de experiencia, las cuales forman la Secuencia Causal:
Ser >>> Sentir >>> Pensar >>> Hacer >>> Tener
Identidad >>> Emoción >>> Mente >>> Acciones >>> Resultados
El propósito de Psicánica es darte el poder personal de tomar control de tu vida; de eliminar toda energía negativa (emociones, pensamientos, conflictos en relaciones, dolor y sufrimiento), para luego crear tu vida como tú la quieres.
Vives en 2 mundos: un mundo externo (físico) que navegas con tu cuerpo; y un mundo interno (no-físico/psicánico) que navegas con tu Ser, tu Voluntad – Consciencia.
Esta secuencia la aplicamos en nuestra vida, en cada situación sin darnos cuenta, y opera directamente desde nuestro inconsciente de manera automática, con toda la información que ha acumulado desde que somos bebés, e incluso, antes de nacer. ¿Cuál es esta información? Nuestra propia identidad, nuestras creencias de quienes somos, nuestras creencias sobre los diferentes eventos o situaciones que hemos experimentado y la forma como percibimos al mundo, y cómo nos sentimos al respecto.
Desde niños, nos han enseñado solo a centrar nuestra atención en las cosas malas que nos pasan o que suceden a nuestro alrededor. Nos han enseñado a prestar mayor atención a nuestros errores y fallas. Eso lo repetimos en cada momento, es tanto que lo hemos convertido en nuestro estilo de vida, es decir, en una costumbre, por lo que lo hacemos sin darnos cuenta.
Esto a su vez ha ocasionado que experimentemos emociones acerca de eso que no nos gusta. Sin embargo, como no queremos experimentar o sentir algo que no nos gusta, nos resistimos a sentirla. Esta resistencia es la que causa dolor y sufrimiento, porque es algo que no debió haber pasado y porque nos hace sentir muy mal.
Cada día de nuestra vida vamos generando sensaciones que no nos gustan, y hemos aprendido a ignorarlas, y a simular que no están ahí, y no sólo eso, a creer que no son importantes. Con esto vamos generando pensamientos que nos hacen daño sin saberlo y los almacenamos en nuestro subconsciente. Por lo anterior, podemos decir que nuestro subconsciente está formado (además de otras cosas) por emociones que son alimentados por esos pensamientos, y los pensamientos son potencializados por esas mismas emociones.
Las emociones que no se sienten, que nos resistimos a experimentar, se van quedando atrapadas en el cuerpo en forma de energía densa, por eso, cuando viene un estímulo externo que se adapta a eso que no nos gusta, la emoción se detona, es decir, ese estímulo se convierte en un botón que activa a la emoción atrapada. En ese momento, se les une el pensamiento, esas creencias que acompañan a esas emociones, por esta razón tendemos a ser tan crueles con nosotros mismos cuando estamos activados en una emoción negativa.
Si decimos que esto es un hábito que hemos aprendido a realizar desde niños, es algo que nosotros creamos. La buena noticia es que es posible revertir su efecto de raíz.
El trabajar en uno mismo, es una invitación a participar en la gran celebración que es la vida, el primer paso es la decisión personal, (recomendable ser guiado por un mentor para poder identificar cuáles son esas emociones que te están afectando) y a ser consciente de ellas, así como de los pensamientos que las acompañan.
Aprenderás a sentir de manera enfocada, en un ambiente en el que te sientas seguro y protegido, libre de toda crítica o juicio, para que vayas quitando la carga pesada que sientes hasta que esta sea deshecha. Una vez eliminada la carga emocional, la mente queda libre para ser reprogramada y redirigir su enfoque hacia los pensamientos potencializadores y empoderadores, esos que te harán tener los resultados que deseas en tu vida.
Una persona que libera carga emocional limitante, empieza a experimentar una mente cada vez más libre, pues ya no tiene que mantenerse alerta para no dejar que se experimente una emoción que lo hace sentir en peligro.
¡Sentir conscientemente es increíble!
Escrito por Paula de los Ríos / Diciembre, 2020